el hijo le responde: "recuerda que yo sigo tus pasos"
Efectivamente, nosotros somos modelo de nuestros hijos…
Esa es una de mis grandes preocupaciones, pero no por ello, ando de cabeza todo el día pensando en lo que ve o no ve, mi hijo de mí. Es más, creo que nuestros hijos han de ver que sus padres son personas con defectos y virtudes, de los que pueden aprender tanto como sus padres de ellos.
Lo mejor de todo es cuando son ellos son los que te corrigen a tí. Ahí es cuando te das cuenta que tus enseñanzas no han caído en saco roto.
Recuerdo un vídeo que circulaba por la red en la que unos niños reproducían lo que veían hacer a sus padres, sus actitudes eran agresivas, intransigentes, déspotas. Me dejó tan noqueada que decidí inculcarle desde muy pequeñito que ante todo debía ser buena persona y exigirme que yo lo fuera.
Encima de la mesa de su estudió le diseñé un cuadrito que funcionara como recordatorio de lo que debía ser una máxima en su vida.
El tercero:
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Hacer de él una persona buena y responsable de sus actos.
Que no me pueda decir nunca: "Mamá, tú no me dijiste que las cosas eran así"
Espero estar haciendo lo mejor para él.
Supongo que todas las madres queremos lo mismo.
El futuro me dará la razón o me la quitará.
¿Os preocupa lo que vuestros hijos piensen de vosotros? ¿De cómo sois y os comportáis?
Como madre siento las mismas preocupaciones, y tengo la tonta ilusion que los padres desde nuestro hogar podemos hacer mucho para cambiar un poquito el mundo, con la educación que demos a nuestros hijos. Recuerdo con mucho cariño la primera cita con la profesora de infantil de mi hijo, cuando destacó que era un niño muy noble. De verdad sentí una inmensa alegría.
ResponderEliminarTu hijo será brillante seguro!!!
María, de "tonta ilusión" nada, creo que en casa de da una base sólida como personas, por lo tanto como bien dices se puede cambiar el mundo.
EliminarLa nobleza es de esas cosas que te hacen sentir sumamente orgullosa. En palabras de Benedetti "porque estás hecho de buena madera…"
Un abrazo